En la sesión de la Legislatura provincial de este miércoles el humor se hizo presente en formato de una anécdota graciosa, o al menos así fue presentada, que contó la Legisladora María Rosa Marcone, presidente del Bloque Encuentro Vecinal Córdoba.
Los legisladores trataron en la sesión el Paquete de Leyes Económicas del Gobierno de la Provincia de Córdoba para 2023, el Presupuesto provincial para el año que viene; primero fue presentado a través de un informe por el Legislador oficialista Leonardo Limia y luego fue el turno del uso de la palabra de los legisladores que representan a los distintos bloques opositores.
Como no es difícil de imaginar la oposición realiza cuestionamientos al Presupuesto, es habitual que todos los años ocurra lo mismo, y cuando le tocó el turno de hablar a la Legisladora Marcone quien se dispuso a desgranar su mensaje oposición, pero grande fue la sorpresa de los presentes cuando la legisladora comenzó diciendo que iba a contar una anécdota de su abuela de cuando ella era niña, y a continuación relató que su abuela «tenía como empleada para tareas del hogar a una inmigrante italiana recién llegada que no conocía nuestro idioma, a quién enviaba diariamente a realizar las compras para cocinar, resulta que la empleada», continuó el relato la legisladora de Encuentro Vecinal «volvía de las compras con una prolija lista de todo lo comprado y su valor, y en esa lista llamaba la atención de mi abuela un ítem que se repetía a diario y que se refería a una compra ‘Persi'», continuó el relato; «al principio mi abuelita no se animaba a preguntar qué era ‘Persi’, temiedo no poder recibir una respuesta clara de la empleada italiana, sin embargo ante la reiteración del ‘Persi’, y que el dinero que en ese concepto salía era cada vez mayor, finalmente la italiana fue interrogada; la empleada sin inmutarse respondió en un castellano atravezado que tenía que enviar dinero a su familia en Italia y que su manera de virlarlo del presupuesto de su abuela era con las compras, y que ‘Persi’ significaba ‘Persicola'» terminó su anécdota la legisladora con un chiste que no recibió una respuesta en risas como supone una buena humorada.
Sin embargo el chiste ‘Persi’ dejó el comentario entre los legisladores que no están acostumbrados a este tipo de situaciones sino a rostros adustos y palabras duras; una bocanada de humor que a pesar de lo inocente de la gracia, no dejó de marcar diferencia.
