La joven de 24 años recibió un disparo de de arma de fuego en el acto del gremio de limpieza Soelsac, el sábado pasado en Club el Yapeyú. El asesinato está directamente relacionado con las elecciones dentro del sindicato Soelsac y con las dos facciones en competencia: el oficialismo, dirigido por Sergio Fittipaldi, y la oposición Más Soelsac, apadrinada por Franco Saillén, histórico dirigente del Surrbac.
Sobre la responsabilidad del crimen se culparon mutuamente los dos dirigentes en pugna, Fittipaldi y Saillen; el primero que habló fue Saillen, apenas conocido el hecho expresando: «no tenemos ninguna duda que es una maniobra de Fittipaldi, quien, en claro conocimiento de la inminente derrota en las elecciones del gremio, recurre a lo que sea. no solo condenamos este terrible hecho, sino que exigimos el inmediato esclarecimiento por parte de la Justicia de esta muerte que enluta a toda nuestra comunidad».
Ahora Fittipaldi acaba de dar a conocer un comunicado en la que sostiene que «el asesinato fue el trágico desenlace de numerosos actos de violencia encabezados por el grupo liderado por Franco Saillén con el objetivo de sembrar un escenario de pánico y caos entre los trabajadores que nuclea el Soelsac”.
Mientras la justicia trabaja siguen los cruces entre las dos facciones que, lejos de calmar los ánimos continúan con un enfrentamiento demencial que ya se cobreó la vida de una joven mujer.
