Justo cuando el referi pite el comienzo del partido Alemania Japón en la copa del mundo arranca en la Legislatura de la provincia de Córdoba la reunión de representantes de Intendentes y Jefes Comunales de todos los partidos para volver a pedir, una vez más, que los legisladores provinciales modifiquen la modificación que introdujeron a la Ley electoral en 2016, en su artículo 7, y que en lugar de decir que la vigencia de la misma rige desde el período 2015-2019, se lo corrija y diga «2019-2023».
Si bien el pedido parece sencillo y entendible, y además atendible para la mirada de los gobernantes locales que aducen que les cambiaron la ley cuando ya estaban en el ejercicio del primer mandato, y que para peor en el medio les tocó la pandemia, para legisladores y jefes políticos tiene otra trascendencia, más relacionada con principios políticos y disputas pre electorales.
Los intendentes y autoridades comunales van a ser recibidos por los legisladores opositores, los primeros van a insistir en sus argumentos, enumerados arriba, los legisladores de la oposición van a reiterar que no están dispuestos a aprobar la re reelección y que ese es un tema que depende del oficialismo porque tiene los votos para sancionarlo, sin embargo esta vez los intendentes no les van a dejar pasar ese argumento evasivo les van a asegurar que ellos pueden conseguir que el oficialismo trate el proyecto si los opositores se comprometen a analizarlo con una actitud en favor de aprobar la modificación.
Por eso la pelota les va a quedar a los legisladores opositores que deberán decidir si siguen diciendo que no, o si aceptan compartir responsabilidades con el oficialismo y todos juntos habilitan la modificación de la ley y finalmente permiten, por última vez, la re reelección de los actuales mandatarios locales.
Así las cosas, cuando el referi pite el final de Alemania Japón puede que la realidad ha ya cambiado para unos centenares de políticos cordobeses, o no.
