En primer lugar, Pablo Carro asumió como Diputado nacional por el Frente de Todos por un acuerdo interno que así lo había estipulado.
Martín Gill, el candidato que figuró en el primer lugar de la boleta del Frente de Todos de Córdoba prefería continuar en la Secretaría de Obras Públicas de la nación y así lo acordaron, a cambio de que en su lugar asumiera Carro, quien habiendo figurado tercero en la lista, llega a la banca por la Ley de cupos que estipula que se debe mantener el género del legislador en caso de ser reemplazado.
A Olga Riutort, la segunda en la lista del Frente de Todos no le correspondió la banca porque Gill fue proclamado por la Justicia electoral, Distrito Córdoba, como Diputado nacional y presentó su renuncia luego de este trámite formal, al que no asistió.
Si Martín Gill hubiera renunciado a la banca en la Cámara baja antes de ser proclamado, su lugar hubiese correspondido a Riutort, un detalle formal que los protagonistas tuvieron en cuenta para cumplir el acuerdo celebrado durante la campaña.
De esta manera el bloque de Diputados nacionales del Frente de Todos se asegura un miembro que ya venía siendo parte del cuerpo, Carro termina su actual mandato como Diputado Nacional este 10 de diciembre, y ha demostrado largamente su pertenencia, con muy buen diálogo con Máximo Kirchner y los principales referentes kirchneristas en Diputados.
Y Martín Gill puede continuar donde siempre prefirió estar, la Secretaría de Obras Públicas de la nación, ahora con un respaldo más sólido; sólo le resta sortear un último escollo, conseguir una nueva licencia en la Intendencia de Villa María, algo que, sostienen desde su entorno, está muy próximo a concretarse.
