Es la hora del peronismo en la Argentina, y sobre todo en Córdoba, como nunca antes había ocurrido, Córdoba va a tener gobiernos alineados en un mismo signo político, «del mismo palo» aunque cada uno tenga sus particularidades.
No había ocurrido antes porque el kirchnerismo y el delasotismo o el schiarettismo, en su momento histórico,no eran una misma expresión del peronismo y parecían mucho más facciones enfrentadas que de un mismo partido; en cambio ahora, si bien el «llaryorismo», el «schiarettismo» y el «albertismo» no son lo mismo, tendrán la oportunidad de coincidir, o de encontrar coincidencias en lo político y de trabajar juntos en las gestiones municipal, provincial y nacional.
Y es en Córdoba donde más claramente se ve la pertenencia a una misma vertiente y por ende las posibilidades de encontrar coincidencias.
El «llaryorismo» y el «albertismo» como tal son fuerzas en construcción, como ocurre cada vez que alguien llega al poder necesita tener su propia estructura de apoyo, su núcleo de confianza y a partir de allí su propia organización que lo ayude a conducir.
En ambos casos esa construcción es incipiente y sin embargo los dos tienen una primera coincidencia, nacen en el peronismo; al mismo tiempo la continuidad de ambos depende de los logros que consigan en este comienzo, de las alianzas que hagan y de las decisiones que tomen.
El «schiarettismo» llega a este momento en otro nivel, se trata de una construcción que lleva muchos años y que ha demostrado largamente sus condiciones, sin embargo su lider, Juan Schiaretti, está llegando al final de su carrera política y por ende su sector deberá resolver cómo continúa, si logra mantenerse compacto y en la misma línea o si toma diferentes caminos en torno a los principales referentes.
La coincidencia nuevamente es que más allá de caudillismos necesarios todos son peronistas, ninguno dejará de serlo y todos se necesitan para darle continuidad a sus proyectos, por ello, en el aspecto político es el momento de ellos: Llaryora, Schiaretti y Fernández.
Y es la hora del peronismo para el país, y para Córdoba en lo institucional porque las tres gestiones peronistas que comienzan, aún con matices, van a tener una manera similar de ver la politica, la economía y a la gente, a los cordobeses y a los argentinos, y van a tener un apoyo compartido de más de la mitad de los argentinos.
Es la hora del peronismo porque esta coincidencia de gobiernos peronistas llega en un momento particular del peronismo, del cordobés y del nacional, llega en un momento de transición y de construcción, llega en un momento donde hay que definir a quienes serán los próximos líderes, en Córdoba y en el país, y además hay que gobernar.
En definitiva, los peronistas que quieran ser los líderes del peronismo en el futuro próximo, tanto en Córdoba como en Argentina, deberán gobernar muy bien, porque es su oportunidad histórica, y por ende la oportunidad de todos.
Es la hora del peronismo, y también es la hora de Argentina.
La hora del Peronismo
