Hasta el último día de su gestión la Intendenta saliente de Villa Dolores, Gloria Preyra, ahora Legisladora provincial, siguió recibiendo denuncias, en este caso Julio Herrero, presidente del Tribunal de Cuentas de Villa Dolores en comunicación con Radio Verdad, dijo: “Cuando uno cree que Gloria Pereyra y su entorno no puede ser más corrupto, nos vuelven a sorprender porque el martes detectamos que hay órdenes de compra de combustible en vehículos particulares por lo que le solicitamos a la Secretaría de Gobierno para saber si hay decretos de autos particulares afectados a la función pública y por supuesto no contestaron, pero detectamos que el marido de la intendente que vive en Mina Clavero y que no viene a trabajar desde hace un año a EINAT carga combustible con dinero de los dolorenses.”
El titular del Tribunal de Cuentas agregó, “Vamos sumando a la farmacia del hijo, la facultad de la hija, al adoquinado con un plan de Nación que se hizo en el sector de la casa de Gloria Pereyra, la inmoralidad de la tarjeta de créditos, el hotel y los regalos a la hija, le pido a Gloria Pereyra que no use más la frase “manos limpias” porque ya suena a un chascarrillo que nos hace a todos los dolorenses porque con su accionar demostró que sus manos no están limpias.”
Para Herrero, la “soberbia” nubló el juicio de Gloria Pereyra y el reducido grupo que la rodea, “La capacidad política de Gloria Pereyra es muy limitada y la transición es un caos, pretende no dejar gobernar a Maxi Rivarola, quiere imponer presidenta en el Concejo Deliberante y en el Tribunal de Cuentas, además de funcionarios, ella pensó que Rivarola como intendente iba a ser un pasajero de un colectivo manejado por ella.”
