Si bien ante la consulta cualquier político dirá que está abocado a su actividad y que no es tiempo de candidaturas, la realidad es que sí están pensando en eso y también se trabaja, algunos de manera discreta pero activamente, algunos muy en silencio, otros que lo comienzan a analizar y otros que desisten, por ahora.
Sin dudas las mayores posibilidades hoy las tienen los candidatos oficialistas, teniendo en cuenta el alto nivel de aceptación pública que están teniendo las gestiones del gobernador Juan Schiaretti y del Intendente Martín Llaryora, los candidatos peronistas a suceder a Martín Llaryora son hasta ahora hombres de gestión, aunque en todos los casos el primer salvado que hay que hacer son las propias declaraciones del Intendente que en cuanta declaración pública realizó aclaró que no tiene definido su futuro y que no descarta ser candidato a la reelección para continuar al frente del Palacio 6 de Julio por un período más.
Si bien hasta ahora no hay mediciones sobre candidaturas, claramente quien mejor mide en conocimiento público e imagen positiva en el ámbito de la ciudad de Córdoba es el Secretario de Gobierno Miguel Siciliano, por su función tiene una alta exposición mediática y de gestión que lo lleva a mantener un contacto permanente con los vecinos de la ciudad; sin embargo fuentes cercanas a Siciliano le aseguraron a Política Córdoba que no está en los planes del funcionario ser candidato a Intendente, ni tampoco tiene previsto en el futuro ningún lanzamiento o presentación en ese sentido, dicen que para Miguel Siciliano la prioridad absoluta pasa por seguir acompañando al Intendente, realizar una buena gestión en su cargo y que por ahora sólo estará enfocado en eso.
Sin Siciliano en la carrera para la Intendencia capitalina, por ahora, el otro candidato que suena desde hace tiempo es Marcelo Rodio, el Presidente de la Tamse, la cada vez más poderosa empresa de transporte y de servicios de la Municipalidad de Córdoba y hombre de estrecha confianza de Martín Llaryora, si bien Rodio también sostiene estar fuertemente centrado en su gestión, están trabajando para que las recientes unidades 0 Km adquiridas puedan salir a la calle prontamente, no descarta su candidatura, al contrario, sostiene que para él sería un honor ser tenido en cuenta por el Intendente para sucederlo y continúa sumando logros como buen gestor.
El otro de los candidatos del peronismo de la ciudad es el Viceintendente y hombre del delasotismo, Daniel Passerini, quien sostiene esta aspiración desde la anterior campaña electoral que consagró a Martín Llaryora y con quien finalmente integró la fórmula ganadora, también el Viceintendente le dijo a Política Córdoba estar enfocado en su gestión en la conducción del Concejo Deliberante de la ciudad, por estos días con una agenda cargada con el análisis del paquete presupuestario para 2022 y la ordenanza para las dos mil nuevas placas de taxis y remises para la ciudad.
En el caso de Passerini, un delasotista histórico, algunos ponen un paréntesis ante una posible aspiración para la Intendencia de Córdoba de Natalia De la Sota, sin embargo también explican que la hija del reconocido gobernador tendría aspiraciones provinciales.
Finalmente, por el lado del peronismo de la ciudad, por estos días el nuevo nombre que ha cobrado fuerza es el de Paulo Cassinerio, el flamante Ministro de Vinculación Comunitaria, Protocolo y Comunicación, hombre del viguismo, con muy buena relación con todos los sectores del peronismo que acaba de ser «repatriado» por Schiaretti, con una función trascendente desde el gobierno provincial que le dará una visibilidad pública que, esperan, «levante su conocimiento» ya que a pesar de que acaba de ser Diputado nacional por Córdoba y antes titular de la Agencia Córdoba Joven, aún no tiene una imagen alta de reconocimiento por parte de los cordobeses.
Sostienen, quienes quieren que Paulo Cassinerio se sume a la grilla de candidatos a Intendentes por el peronismo, que el nuevo ministro reúne todas las condiciones para ser candidato.
Por el lado de la oposición, con posibilidades ciertas, están los candidatos de la alianza Juntos por el Cambio, y acá se abre la gran incógnita, son varios los nombres en potencial, pero pocos los que se animan a decirlo; Juan Negri es uno de los radicales que no oculta sus aspiraciones y ya trabaja por su candidatura, aunque la imagen del «negrismo» en baja ha comenzado a preocupar en los últimos días, razón por la cual su equipo trabaja en un lanzamiento que lo reposicione en la carrera hacia 2023.
Y hasta ahora no hay muchos nombres más, aunque en los últimos días comenzó a tomar forma la posibilidad de que Rodrigo De Loredo, el flamante Diputado nacional, y quién hasta ahora siempre habló de sus deseos de ser candidato a gobernador, finalmente acepte la sugerencia de Luis Juez y sea candidato a Intendente de la ciudad de Córdoba, algunos creen que puede resultar positivo reeditar la fórmula Juez-De Loredo que tantas satisfacciones les dio para la campaña legislativa, aunque en este caso para la Gobernación y la Intendencia; la gran cuestión en este punto es la falta de aceptación de los radicales que se niegan a votar a Juez.
Por último, hablando de posibilidades reales, quién cree tener posibilidades reales de obtener el voto de los cordobeses y convertirse en Intendente de la ciudad es Juan Pablo Quinteros, el actual Concejal de la ciudad de Córdoba por el partido Encuentro Vecinal, Quinteros no ha explicado si piensa ser candidato por ese partido o espera alguna alianza o confluencia que le de las posibilidades necesarias.
Apenas comience el año político, marzo de 2022, la carrera hacia la Intendencia cobrará una vertiginosidad que agregará aspiraciones y nombres, pero se puede asegurar ahora que el candidato del peronismo saldrá de entre los nombres mencionados, mientras habrá que esperar que sucede en la Unión Cívica Radical.
