La Libertad Avanza, el partido político fundado por el presidente Javier Milei, no tenía una existencia real en la provincia de Córdoba durante 2023, más allá de la abrumadora cantidad de votos que llevaron a la presidencia al líder político de derecha.
Ese espacio político tuvo un apurado, y traumático, armado electoral de la mano de algunas voluntades entusiastas con las nuevas ideas libertarias más los aliados de siempre, partidos y dirigentes, comunmente conocidos como «sellos», que se acercaron al nuevo fenómeno para aportar experiencia en un ámbito donde los «mileístas puros», ajenos a la actividad política hasta ese momento, no sabían lo que tenían que hacer.
El triunfo arrollador de Milei abrió paso a una depuración que en Córdoba va exfoliando a los aliados externos para dar paso a los primeros intentos de construcción propia, con dirigentes autenticamente libertarios, del riñón del presidente, que sin experiencia política y cada uno por su lado, nunca formaron parte de una misma organización, comienzan a buscar darle forma a una necesaria expresión partidaria que les permita sumarse a las compulsas electorales próximas de manera organizada.
El reto está abierto y hoy depende del trabajo y el esfuerzo que unos pocos comenzaron a desarrollar para que La Libertad Avanza sea una realidad en 2025 y 2027; hoy ese proyecto está en desarrollo y dependerá de su logro que el partido de Milei consiga tener en Córdoba su propia y pura expresión electoral, o que en los próximos turnos se vea nuevamente en la necesidad de abrirle las puertas, y las listas, a los sellos de siempre.
