La intendenta de Saldán, Carolina Cristori, se quejó de que desde hace más de un año el Ejecutivo viene advirtiendo la necesidad de incrementar el costo del servicio de agua potable para garantizar un sistema de distribución eficiente y reclama un aumento del 150% sobre la tarifa actual. Sin embargo el Concejo Deliberante aprobó apenas un 50% de incremento. “Con este aumento ínfimo no se logra ni siquiera cubrir el costo de agua en bloque, mucho menos afrontar una refinanciación”, subrayó Cristori.
El presidente del Concejo Deliberante de Saldán, Mauricio Oller, respondió a las críticas de la intendenta Carolina Cristori sobre la crisis del agua que afecta a la ciudad y afirmó que el principal problema es la “mala administración” del Ejecutivo.
Oller aseguró que la deuda que mantiene la Municipalidad por el suministro de agua potable supera los 300 millones de pesos y que “no corresponde que los vecinos paguen por la inoperancia del Ejecutivo. La Municipalidad cobró el agua y no pagó nunca. La pregunta es: ¿dónde fue a parar esa plata?”, cuestionó.
En sintonía con las tensiones internas del oficialismo, Oller negó un intento de boicot desde el Concejo y sostuvo que la responsabilidad política recae en la intendenta por no coordinar acciones y “no sentarse nunca a dialogar”.
La fractura dentro del oficialismo de Saldán, que atraviesa una crisis de gobernabilidad en medio del conflicto por el servicio de agua, la terminan pagando los vecinos.
